Un equipo investigadores ha podido analizar los efectos positivos y negativos de Internet en el cerebro. Sus hallazgos, publicados por la revista World Psychiatry, no son alarmistas pero requieren precaución y un mayor estudio.
Internet existe desde hace tres décadas pero ha tenido un gran impacto en la humanidad. Sólo hay que fijarse como nos comunicamos, mantenemos nuestras relaciones y obtenemos la información, sin duda, todo ha cambiado y en muy poco tiempo. Pero hay un aspecto que todavía cuestiona a los científicos: ¿cuáles son las consecuencias de todos estos cambios para el cerebro humano?
Un nuevo estudio realizado por investigadores de la Universidad de Harvard en Estados Unidos, la Universidad de Western Sydney, Australia, King’s College de Londres en la Universidad de Oxford y la Universidad de Manchester, EE. UU tratan de responder a esta pregunta. Sus hallazgos fueron publicados por la revista World Psychiatry. De acuerdo con el principio de neuroplasticidad, el cerebro es capaz de modificarse estructuralmente de acuerdo con las experiencias vividas. Por lo tanto, los científicos se han basado en tres áreas para sus experimentos: la capacidad de prestar atención, los procesos de la memoria y la cognición social.
Bueno y malo
Durante las tres encuestas, los datos recopilados permitieron observar pequeños cambios estructurales. La multitarea digital no parece mejorar nuestras capacidades de atención, almacenar nuestra "memoria de hechos" ni tampoco nos permitiría concentrarnos en tareas más ambiciosas, y la interacción social en Internet parece tener aspectos positivos y negativos, dependiendo de la edad. "La revisión no encontró un vínculo causal entre el uso de Internet y la mala salud mental", concluyen los autores del estudio.
Especifican, sin embargo, que se debe trabajar más en las nuevas generaciones. "Los hallazgos de este artículo resaltan cuánto necesitamos aprender sobre el impacto de nuestro mundo digital en la salud mental y la salud cerebral", dijo a Medical News Today el Dr. John Torous, coautor del estudio. "Ciertamente hay nuevos beneficios potenciales para algunos aspectos de la salud, así como nuevos riesgos".
Dado que el uso de Internet puede tener aspectos positivos y negativos, los investigadores señalan algunas reglas de precaución:
- Reducir el número de tareas online.
- Participar en interacciones sociales en la vida real.
- Limitar el tiempo de uso de internet para niños.
- Hablar con los niños sobre los riesgos de internet.